lunes, 7 de marzo de 2011

Déjenme.... si estoy durmiendo.

Hace algunos años un grupo regio cantaba "¡Déjenmeeeee si estoy llorando...!"
Yo he cambiado ligeramente la letra de esa canción pues aunque como ellos bien dicen llorar hace bien al alma, dormir hace bien al cuerpo, a la mente y al alma también.

Mi papá siempre me dijo que cuando uno tiene hijos no vuelve a dormir bien, y veo que así es por muchas razones, pero no son sólo los hijos, son preocupaciones varias las que hacen que el sueño se nos vuelva ligero, o que el insomnio nos ataque. Pero lo que de verdad me molesta es que me despierten ya sea a media noche o en la mañana. Claro, cuando me despiertan mis hijos por tener pesadillas o sentirse mal, no me molesta para nada, pero que alguien decida que ya es hora de que me despierte cuando no hay pendientes, eso sí no me gusta. Sufro en las mañanas por tener que despertar a mis hijos para irse a la escuela, cuido el sueño de quien sea por todos los medios posibles, y disfruto mucho cuando puedo despertarme cuando terminé de dormir, no cuando sonó el despertador.

Pero más allá de mis gustos y disgustos, lo cierto es que dormir bien es importantísimo para el ser humano en todos sus niveles. El descanso es indispensable para el buen funcionamiento y la salud. En los niños es clarísimo, cuando no duermen lo suficiente, están de mal humor, demasiado inquietos, berrinchudos, en resumen insoportables. Y nosotros los adultos también, cuando nos sentimos cansados no funcionamos igual que otros días, no tenemos paciencia y estamos de malas.

Hace unos días ví un documental en la tele sobre una enfermedad horrible donde los pacientes simplemente no se pueden dormir. Es una condición genética que se desarrolla en cualquier momento de la vida, en la que cada vez duermen menos y les cuesta más y más trabajo conciliar el sueño, ni con ayuda de somníferos, van perdiendo el control de sus vidas hasta que se mueren por no descansar. Esto es un caso extremo, pero realmente es importante el descanso.

Sólo consiguiendo las horas necesarias de sueño profundo se activan funciones de reparación y mantenimiento del cuerpo, además del aprendizaje, el procesamiento de lo vivido y aprendido durante el día, la solución a algunas cosas, es como un reseteo al sistema para que todas las aplicaciones carguen correctamente y puedan funcionar como es debido.
La hormona del crecimiento, por ejemplo, sólo se activa cuando se lleva cierto tiempo de sueño profundo (no pude encontrar hoy el dato exacto), y así otras muchas funciones.

Algo que me parece realmente preocupante es la falta de sueño en los niños. Actualmente la escuela empieza más temprano que antes, ahora las primarias entran a las 7:30 am, y con la imposición de los camiones de escuela, los niños se tienen que levantar mucho antes para luego pasarse más de media hora dando vueltas en el camión, esto sumado a las múltiples actividades vespertinas, tareas y demás, está ocasionando que no duerman las horas que deberían, y esto les trae luego problemas de cansancio que terminan en mal humor, baja del rendimiento escolar, problemas de conducta. Un niño pequeño, digamos de primero de primaria (6 años cumplidos para entrar) que se levanta a las 6:30 de la mañana, debería estar en la cama a las 7:30 para dormir 11 horas, que sería lo óptimo para su edad. ¿Cuántos hay que se duermen a esa hora? Tristemente no muchos, y nadie parece preocuparse por esto ni darse cuenta de que sus hijos necesitan dormir más.

¿Y nosotros? ¿Dormimos lo suficiente? Yo creo que no, y vivimos cansados, estresados, preocupados y cuando por fin se acaba el día y nos vamos a la cama, nos llevamos los problemas con nosotros y claro, viene el insomnio.

Los invito a buscar una buena noche de sueño por lo menos una vez a la semana, irse a la cama a buena hora, leer un libro un ratito, dejar fuera de la cama las preocupaciones y problemas, total, a las 4 de la mañana no los vamos a resolver, además en la noche todo se ve más negro, más grave... no, no cavilemos ni le demos mil vueltas a las cosas durante la noche.
Procurar relajarnos antes de dormir, respirar hondo, imaginarnos cómo dejamos nuestros pendientes fuera de nuestro cuarto, en una caja imaginaria de la que hasta puede que se escapen algunos en la noche y ya no sean problemas al despertar. Y si a media noche te despiertas por cualquier razón... no caigas en la tentación de prender la blackberry ni la tele, no prendas la luz, date la vuelta y procura poner la mente en blanco, o reza para no pensar en todo lo demás. Yo te aseguro que si duermes bien, tu cabeza podrá resolver mejor y más eficientemente los problemas en la mañana.

Yo creo que si alguien está dormido es porque lo necesita, ¿o no?

Por ahora me despido, me voy a dormir, descansen y disfruten sus sueños, y déjenme, si estoy dormida.

2 comentarios:

  1. MUY CIERTO, POR ESO YO LOS DOMINGOS ME LEVANTO HASTA QUE ME CANSO DE DESCANSAR. SALUDOS TERE.
    MARICRUZ.

    ResponderEliminar
  2. Cuando no puedo dormir, generalmente es por estar recordando mis pendientes. Al descubrirme en esa situación me recuerdo a mí misma que debo de dejar todo en manos de Dios, que si Él quiere se resolvera, me dará tiempo o se me olvidará; muchas veces me funciona.

    ResponderEliminar